Enamórate de mí para que
no me duela tanto.
Eres cruel sabiendo lo que me dueles.
Teniendo
amplio
conocimiento del poder que tienes sobre mí,
sobre mis emociones, mi humor, mi
vida.
Aún consciente de todo te atreves a
arrojarme una piedra y escondes la
mano.
Por favor,
no me hagas dejar de quererte.
no me hagas dejar de quererte.
Porque si bien te
aseguro que no deseo dejar de hacerlo, puedo.
Puedo porque con cada herida que
causas abres mi piel
y creas una salida para que tú, que habitas en mí,
y creas una salida para que tú, que habitas en mí,
salgas
de adentro.
Soy tu fan!
ResponderEliminar